Melatonina en los trastornos de sueño

¡Hola a todos! Hoy vamos a hablar sobre un tema que afecta a muchos de nosotros: el insomnio. ¿Sabías que hay una hormona llamada melatonina que juega un papel crucial en nuestro ciclo de sueño y vigilia? Esta hormona es como un pequeño reloj interno que nos ayuda a saber cuándo es hora de dormir y cuándo es hora de despertar.

Con el paso del tiempo, la producción de melatonina en nuestro cuerpo disminuye, lo que puede explicar por qué tantas personas mayores tienen problemas para dormir bien. Esto ha llevado a muchos a preguntarse si tomar melatonina como suplemento podría ser la solución para mejorar la calidad del sueño.

En esta entrada de blog, vamos a explorar qué es la melatonina, cómo funciona, y qué nos dice la ciencia sobre su uso para tratar el insomnio. También revisaremos las dosis y formulaciones disponibles, y evaluaremos si realmente puede ayudar a tener noches más tranquilas. ¡Vamos a sumergirnos en el fascinante mundo de la melatonina y el sueño!

Vía de síntesis y su regulación

La melatonina (N-acetyl-5 methoxy-tryptamina) es un compuesto indólico que, hasta los años setenta, se consideraba una hormona exclusiva de la glándula pineal. Hoy en día, sabemos que se sintetiza en varios órganos extrapineales y no endocrinos, como la retina, la glándula harderiana, la médula ósea, la piel, las células productoras de serotonina en el tracto gastrointestinal, el cerebelo y el sistema inmunitario. Por lo tanto, la melatonina no es una hormona en el sentido clásico, ya que se produce en diferentes órganos y no tiene un órgano diana específico.

La síntesis y secreción de melatonina están reguladas por el núcleo supraquiasmático (NSQ). A su vez, la melatonina modula el NSQ y los relojes periféricos distribuidos por todo el cuerpo, lo que la convierte en un marcador de los ritmos circadianos.

Para sintetizar melatonina, las células de la glándula pineal toman triptófano de la sangre y lo convierten en serotonina mediante un proceso de hidroxilación y decarboxilación. Finalmente, la serotonina se convierte en se convierte en melatonina

Cambios en la producción de melatonina

La cantidad de melatonina en nuestro cuerpo varía a lo largo de la vida, dependiendo de nuestra etapa y edad. En individuos sanos, la producción de melatonina empieza al anochecer, generalmente entre las 20 y las 22 horas.

La luz es el principal factor que regula la secreción de melatonina. Su efecto depende de varios aspectos: la hora del día, la intensidad, la duración de la exposición y la longitud de onda de la luz. En particular, las células ganglionares de la retina contienen melanopsina, un fotorreceptor sensible a la luz azul, esencial para el correcto funcionamiento del ritmo circadiano.

La exposición a la luz artificial entre la medianoche y las cuatro de la madrugada puede inhibir completamente la secreción de melatonina durante ese periodo. Si la exposición a la luz se realiza por la mañana, adelanta el pico de secreción de melatonina, mientras que la exposición por la tarde lo retrasa. Esta respuesta de fase a la luz se puede utilizar para tratar problemas de desincronización del ritmo circadiano, ajustando los patrones de luz a los que nos exponemos.

Regulación del ritmo circadiano

El ciclo de luz y oscuridad es el principal sincronizador del ritmo circadiano, aunque otros factores como los horarios de alimentación, el ejercicio regular, los horarios de sueño y los contactos sociales también juegan un papel importante.

La estructura que actúa como marcapasos central es el núcleo supraquiasmático (NSQ), que coordina todos los ritmos circadianos. Existen tres vías principales que envían información al NSQ. La principal es el tracto retinohipotalámico, compuesto por células ganglionares de la retina.

Recientemente, se ha descubierto que las conexiones recíprocas entre el NSQ y el núcleo arcuato son esenciales para el correcto funcionamiento del sistema circadiano. El núcleo arcuato es un centro de integración metabólica crucial. Este hallazgo sugiere que alteraciones crónicas en los ritmos circadianos o metabólicos, como cambios en los hábitos alimenticios o en los turnos de trabajo, pueden causar desincronización de las oscilaciones hipotalámicas y aumentar el riesgo de enfermedades. El núcleo arcuato modula la actividad neuronal del NSQ, influenciando directamente la sincronización circadiana.

Acciones de la melatonina

La melatonina favorece el sueño principalmente a través de su capacidad cronobiótica sobre el núcleo supraquiasmático (NSQ), que regula el ritmo circadiano sincronizado con la luz ambiental. Este efecto permite resincronizar los ciclos de vigilia y sueño. Además, la melatonina influye en centros termorreguladores y cardiovasculares, mejorando la calidad del sueño.

Más allá de su función cronobiótica, la melatonina actúa como un potente antioxidante, neutralizando radicales libres de oxígeno y nitrógeno que pueden dañar las células. Sus propiedades antiinflamatorias también contribuyen a su papel protector en el organismo.

Melatonina en el tratamiento del insomnio

Buscemi y sus colegas junto con Ferracioli-Oda y otros investigadores han informado que la melatonina puede reducir el tiempo que tarda en comenzar el sueño. Además, han encontrado efectos positivos significativos tanto en la latencia del inicio del sueño como en su calidad. Sin embargo, es importante mencionar que los efectos observados son pequeños desde una perspectiva clínica. Varios estudios originales también han evaluado los efectos adversos de la melatonina y han concluido que es un fármaco seguro

Conclusiones y agradecimientos

La melatonina, como reguladora principal del ritmo de vigilia y sueño, despierta un gran interés en el tratamiento de los trastornos de insomnio y de fase del sueño. Potenciar la señal fisiológica que induce al sueño parece ser la estrategia más natural para abordar estas condiciones, especialmente cuando ocurren en etapas de la vida con una disminución natural en la síntesis de melatonina. Los datos disponibles, principalmente con melatonina de liberación prolongada, indican que es efectiva tanto para el insomnio primario como para el asociado con otras enfermedades neurológicas, especialmente en personas mayores de 55 años. Además, se destaca por su excelente perfil de tolerabilidad. Las formulaciones de liberación prolongada parecen imitar mejor el patrón de secreción fisiológica, lo que las hace más adecuadas, especialmente considerando que la acción de la melatonina depende del ritmo de secreción y puede variar dependiendo de si su pico de dosificación coincide con una fase específica del ritmo circadiano interno del individuo. Es importante subrayar que la melatonina es un fármaco y debe ser tratada como tal, con los controles de calidad necesarios que se exigen para todos los medicamentos.

Quiero expresarles mi más sincero agradecimiento por dedicar su tiempo a leer sobre la importancia de la regulación del sueño y cómo puede impactar positivamente en nuestra vida diaria. Como profesional en terapias de PSYCH-K, estoy comprometido/a en ayudar a las personas a mejorar su calidad de vida a través de enfoques holísticos y efectivos.

Si estás experimentando dificultades para conciliar el sueño o mantener un ritmo saludable, te invito cordialmente a explorar las terapias de PSYCH-K. Estas técnicas han demostrado ser eficaces para muchas personas en la regulación del sueño y el manejo del estrés. Juntos, podemos trabajar para encontrar soluciones que se adapten a tus necesidades individuales.

No dudes en contactarme para obtener más información o para programar una consulta.

Con amor,

Alessandra

Bibliografía:

  • Melatonina en los trastornos de sueño. (s. f.). Neurología. https://www.elsevier.es/es-revista-neurologia-295-avance-resumen-melatonina-los-trastornos-sueno-S0213485318302007

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1 comentario en «Melatonina en los trastornos de sueño»

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